El control y gestión de flotas, nos puede ayudar en más de una ocasión y nos trae más de un beneficio, dentro de ello, y cómo una de las funciones principales es minimizar o eliminar, si es posible, los riesgos asociados con la inversión en vehículos, mejorando la eficiencia y productividad de estos.
Pero, ¿cómo funciona realmente este sistema? Principalmente el sistema se enfoca en entregar a las empresas diversos dispositivos los cuales ayudarán a poder tener un mayor control de los vehículos asociados, dentro de ellos podemos encontrar el GPS, principalmente, el cual nos indicará cuál es el ubicación real del vehículo y en servicios complementarios, encontramos las cámaras de vigilancia, el sensor de fatiga y sus respectivas variables, las cuales le irán siendo útiles dependiendo de la necesidad de cada uno como empresa.
Al contar con estos dispositivos instalados ya en cada uno de los vehículos que están en tu flota, se puede ir procesando los datos, cada una de las empresas que cuentan con este servicio, pueden gestionar, ordenar y priorizar dependiendo de sus necesidades. Lo cual sirve para tener un mayor control y claridad de lo que se está ejecutando, mejorando así la gestión y la eficiencia de dichos resultados. Pudiendo obtener datos clave como lo son, la distancia recorrida, la detección de impacto, el combustible utilizado, entre otros.
Posteriormente a eso, se hace un envío de datos, a una plataforma donde se recopilan los datos y donde pueden ser analizados de mejor forma, además de eso en paralelo, cada una de las cosas que están sucediendo en el vehículo, puedes ir viéndolas en tiempo real, lo cual te ayuda a prevenir inconvenientes.
No sólo se puede mejorar la optimización de tiempo en los vehículos, sino que también se puede entregar un servicio de mayor calidad, prevenir accidentes, mejorar las rutas y los recorridos.